La victimización: un desequilibrio entre el ego y el yo.

Gracias a las Neurociencias, recientemente se ha comprobado el impacto que tienen nuestros pensamientos en nuestro estado emocional y biológico.
Sabiendo esto, ¿por qué en algunas ocasiones preferimos auto-imponernos un rol de víctima cuando la responsabilidad del resultado depende de nosotros?

Con esto no creas que es imposible ser una víctima, según la RAE, una víctima es una persona que padece daño por culpa ajena o causa fortuita. Es decir, que en ocasiones si somos víctimas, y si sufrimos victimismo, pero, en la mayoría de las situaciones nos quedamos enjaulados en ese rol y generamos tendencia a percibirnos a través de él.
Confundimos cómo queremos que sea el mundo con cómo en realidad es, y eso nos genera un gran miedo e incertidumbre que pocas veces queremos confrontar. Nuestro ego hace frente y nos protege, sin embargo, no siempre lo hace de una forma saludable para el bienestar.

El ego, según el psicoanálisis freudiano₁, es el resultado de la suma de todas las percepciones, sensaciones y pensamientos de uno mismo, y como este se relaciona con el exterior; es inconsciente en su mayoría, y nos brinda herramientas para desenvolvernos con los demás y el mundo en general. Como contradictoriamente se piensa el ego tiene una función muy noble, existe para protegernos y cuidarnos de experiencias que nos dolieron en algún momento de nuestra vida, así, cuando percibimos un patrón similar nuestro ego hace frente para defendernos.

Glosario:

1. Psicoanálisis freudiano: teoría y método psicoterapéutico desarrollado por el médico austriaco Sigmund Freud a finales del siglo XIX y principios del XX. Es considerada una de las corrientes con más influencia para el estudio de la mente humana.
   
   La imagen de la portada es la obra de arte:
   Lake George
   De Georgia O'Keeffe, 1922

Te comparto una pregunta que puedes hacerte para reconocer desde que rol estás viviendo:

¿Vivo en un mundo hóstil que me impide lograr mis metas o vivo en un mundo amigable que aporta a mi crecimiento?

En conclusión, el ego puede llevarnos a adoptar un papel de víctima en nuestras vidas, impidiéndonos asumir responsabilidad por nuestras acciones y buscar soluciones constructivas a nuestros problemas. Liberarnos del victimismo impulsado por el ego requiere autoconciencia, responsabilidad personal, humildad, gratitud, y en ocasiones, ayuda profesional de un psicoterapeuta.
Al hacerlo, podemos encontrar un mayor bienestar y plenitud en nuestras vidas.

Autovictimización

El ego se vuelve limitante cuando no reconocemos de donde viene, una persona demasiado pendiente de la satisfacción de sus intereses y percepciones tendrá dificultades para entender los deseos y necesidades ajenas, convirtiéndose así en alguien centrado en sí mismo, por lo tanto, querrá que los demás actúen en función a el o ella.

La autovictimización consiste en identificar al otro como principal responsable de los fracasos, frustraciones y desengaños propios. Es una forma de negación que busca protegernos para reforzar nuestro autoestima, pero, paradójicamente en realidad lo lastima.

Nuestro deseo de protegernos nos impide avanzar (Shane Parrish, 2023). Puedes invertir tu energía, tu tiempo, incluso tu dinero, en cosas fuera de tu control, en lugar de enfocarte en resolver las que están dentro, ¿cuántas veces no te has quejado por tener un mal jefe, un mal clima, o por las reacciones impulsivas y no siempre amables del otro, quedándote anclado en esos pensamientos y esas emociones por días o incluso semanas?
Pareciera que si tenemos una "excusa" del exterior para no tomar responsabilidad sobre nuestras propias decisiones y potenciales, podemos mantenernos en una zona de confort, la cual el ego reconoce como segura.

Como salir de este rol para un mejor bienestar y crecimiento personal

Lo primero que tienes que hacer, es identificar si estás dentro del victimismo, para ello, te recomiendo que cuando estés frente a una situación estresante o frustrante hagas una lista de las cosas que están dentro de tu control y las cosas que estén fuera. 

Por ejemplo, me molesta que siempre que viene mi mamá a mi casa hace comentarios negativos sobre mi.

Figura 1. Modelo de la "metáfora del Iceberg" para explicar la psique según Freud.
La parte superficial del iceberg, visible desde el mundo exterior, representa la estructura psíquica consciente donde se encuentra el yo.
Y la parte sumergida representa lo inconsciente, donde se encuentra el ego.

Dentro de mi control

El como reacciono yo 
Comunicar lo que me incomoda
Invitarla a mi casa

Fuera de mi control

Las reacciones de mi mamá
Los comentarios que hace mi mamá
Los pensamientos de mi mamá

Ahora, te vas a enfocar únicamente en solucionar las situaciones dentro de tu control, y soltarás las que estén fuera. Reconociendo que el mundo no vive un complot en contra tuya, simplemente es nuestro ego y su necesidad de protegernos quien nos da esa errónea percepción.

Es importante cambiar estos pensamientos ya que el victimismo llega a tener una serie de consecuencias negativas tanto a nivel emocional, mental, como en las relaciones interpersonales y en el desarrollo personal.
Como por ejemplo:
- Falta de responsabilidad
- Dependencia emocional
- Baja autoestima
- Dificultades en las relaciones 
- Trastornos del estado de ánimo
- Falta de crecimiento personal/profesional

Bibliografía

1. Real Academia Española. (s.f.). Víctima. En Diccionario de la lengua española.
   Consultado el 12 de Mayo de 2024, de https://rae.es/dpb/víctima

2. Sigmund Freud, El yo y el ello. (2.a ed.). (1923).

3. Shane Parrish, Pensar con claridad: Convierte los momentos ordinarios en resultados extraordinarios. (2023). Diana Editorial.

4. Bianchinetta, B. S., Gisselle, H. M., & Ileana, S. P. (2009). En torno a la Teoría del Iceberg : adquisición real de la cultura meta en el aula de L2. https://repositorio.una.ac.cr/handle/11056/19458